Hoy se conmemora en todo el planeta el Día Mundial de la Endometriosis, fecha destinada a visibilizar esta enfermedad que, aunque “teóricamente” benigna, compromete seriamente el día a día de muchas mujeres, así como su fertilidad siendo actualmente uno de los principales problemas que vemos en las clínicas y que impiden lograr el embarazo.
En este sentido, uno de los grandes problemas de la endometriosis es el desconocimiento sobre la propia enfermedad y sus síntomas. No es infrecuente que la mujer consulte a diferentes especialistas por el dolor y que no solo no se identifique la causa del mismo, sino que la mujer deba oír aquello de que “es normal que la regla duela”. De hecho, la demora en el diagnóstico implica una, por una parte, una sensación de frustración por parte de la mujer, por no identificarse la causa del dolor y, por otra, una progresión de la enfermedad.
A continuación, os explicamos qué es y cuáles son las señales más comunes de la endometriosis.
¿Qué es la endometriosis?
La endometriosis consiste en la presencia o crecimiento del tejido propio del endometrio fuera de la cavidad uterina (su “lugar natural”), especialmente en el útero, los ovarios y las trompas de Falopio.
Su síntoma más evidente es la presencia de un dolor intenso en la zona pélvica, que puede incluso volverse crónico, pero que a menudo, y en gran parte por el desconocimiento y la falta de concienciación que existe sobre la enfermedad, se confunde con el dolor propio de la menstruación cuando en absoluto debe ser así.
Es importante poner de manifiesto que, a pesar de considerarse una enfermedad de carácter benigno, este dolor puede llegar a incapacitar a la mujer en su día a día, llegando a ser necesarios episodios de baja laboral ante la intensidad del dolor, y afectar directamente en su ámbito personal.
Desde Reproducción Bilbao apostamos por trabajar para dar cada vez más visibilidad a un problema muy real para muchas mujeres al que se le suma en muchas ocasiones la incomprensión ante sus diferentes síntomas.
La endometriosis en cifras
Según la propia Organización Mundial de la Salud (OMS), la endometriosis afecta en la actualidad a 190 millones de mujeres y niñas en edad reproductiva en todo el mundo, es decir, a cerca del 10% de este grupo poblacional.
Si extrapolamos estos datos, y según el Departamento de Salud de Euskadi – Osakidetza, nos indica que, en el País Vasco, entre el 10 y 15% de las mujeres en edad reproductiva padecen endometriosis, lo que la sitúa, además, como uno de los principales problemas relacionados con su fertilidad como veremos más adelante.
Síntomas y tratamiento de la endometriosis
La endometriosis puede presentar diferentes síntomas y es importante entenderlos tanto desde el punto de vista físico como en un plano emocional.
Como hemos dicho, el dolor propio de la endometriosis llega a afectar realmente a la calidad de vida de las mujeres que los sufren, lo que a larga también afecta desde un punto de vista psicológico. A ello debemos sumarle una falta de entendimiento de la situación lo que puede provocar que el estado emocional de la paciente pueda empeorar.
Desde el punto de vista físico, la endometriosis tiene el riesgo de convertir este dolor en un dolor crónico, de ahí la importancia de ante la más mínima sospecha recurrir a un especialista para diagnosticar la enfermedad o descartarla y buscar el origen de ese dolor.
Si hablamos de los síntomas más reconocibles de la enfermedad, al margen del dolor, debemos citar:
- Sangrado abundante
- Dolor durante las relaciones sexuales
- Problemas digestivos
- Estreñimiento
- Dificultades para lograr el embarazo
Sobre el tratamiento, debemos decir que igual que la endometriosis es una enfermedad cuyo origen aún no ha puesto de acuerdo a la comunidad científica, su tratamiento definitivo es igualmente complejo, y requiere en muchas ocasiones una actuación multidisciplinar incluyendo especialistas en ginecología, fisioterapia, digestivo y nutrición.
Cuando se plantea un tratamiento médico de la endometriosis se intenta, por una parte, frenar o detener su progresión y, por otra, aliviar el dolor.
En ciertas ocasiones, el tratamiento médico no es suficiente y se ha de recurrir al tratamiento quirúrgico que intenta extirpar el tejido endometrial que está fuera de su ubicación natural y que ocasiona la inflamación y adherencias causantes del dolor, aunque ello no garantiza que no pueda volver a aparecer más adelante.
¿Hay una relación entre endometriosis e infertilidad?
Aunque no sucede en todos los casos, y lograr el embarazo de forma natural con endometriosis es totalmente viable, es cierto que puede impactar negativamente sobre la fertilidad debido a diversos factores, como la inflamación, la formación de adherencias o el desarrollo de quistes ováricos que aumentan la probabilidad de que las mujeres con esta enfermedad encuentren dificultades para lograr el embarazo.
Recordad que, al inicio del artículo, hemos mencionado que la endometriosis afecta en la actualidad al 10% de las mujeres en edad reproductiva por lo que es un problema evidente.
Cuando esto sucede, la reproducción asistida se convierte en la mejor alternativa para lograr el embarazo. Entre las técnicas disponibles, la Fecundación in Vitro (FIV) es la que ofrece mayores tasas de éxito.
Además, es importante considerar que la endometriosis también puede diagnosticarse en mujeres que, si bien no desean ser madres en el momento, no descartan esa posibilidad en el futuro. Para ellas, la preservación de la fertilidad mediante la vitrificación de ovocitos, idealmente antes de los 35 años, puede ser una estrategia clave para facilitar la maternidad más adelante.
Fisioterapia para pacientes con endometriosis en Reproducción Bilbao
En Reproducción Bilbao entendemos el dolor causado por la endometriosis y queremos estar a vuestro lado en este momento.
Desde nuestra Unidad de Fisioterapia trabajamos con pacientes con endometriosis en la mejora de la movilidad de los tejidos y el fortalecimiento de la musculatura del suelo pélvico, así como en aliviar el dolor pélvico.
Para ello, trabajamos tanto ejercicios y terapias manuales como el aprendizaje de técnicas de respiración y relajación que permiten aliviar los síntomas y el dolor.
Además, la Unidad de Fisioterapia de Reproducción Bilbao trabaja directamente con el equipo médico de la clínica por lo que, cuando sea necesario, se trabajará de forma transversal en ambas áreas de manera conjunta para una mejora se los síntomas de la endometriosis de las pacientes.
