La decisión de someterse a una vasectomía por parte del hombre es un momento importante dentro del ámbito de una pareja.
Con esta decisión, a priori, constata su propósito de poner el cierre a sus deseos reproductivos y no buscar ampliar la familia en el futuro. En este caso, la vasectomía supone un punto de inflexión para el hombre.
Sin embargo, no es infrecuente que recibamos a pacientes en Reproducción Bilbao con la duda de si es posible volver a ser padre a pesar de la vasectomía.
¿Los posibles motivos? Aunque este cambio es totalmente personal, la vuelta al deseo por tener un nuevo hijo o un cambio de pareja y con ello la ilusión por formar una nueva familia son causas frecuentes.
A continuación, os explicamos en qué consiste la vasectomía y las posibles opciones que pueden encontrar los hombres para ser padres después de ésta.
¿Qué es la vasectomía?
La vasectomía es un método anticonceptivo masculino con carácter permanente.
Para ello es necesario realizar una pequeña intervención quirúrgica en la que se cortan o ligan los conductos deferentes, responsables de la circulación del transporte de los espermatozoides desde los testículos.
De esta manera se impide que los espermatozoides sean liberados durante la eyaculación imposibilitando la fecundación del óvulo.
¿Es irreversible una vasectomía?
Revertir una vasectomía es posible. Sin embargo, debemos de tener en cuenta que no siempre resulta efectiva y pueda darse la situación de que no se produzca la recuperación de la producción de los espermatozoides.
En este sentido, debemos tener en cuenta factores como el tiempo que haya transcurrido desde la realización de la vasectomía, la edad del hombre y otros factores que puedan haber afectado en ese tiempo a la propia salud reproductiva del hombre.
No obstante, la técnica más empleada para revertir esta cirugía es la llamada “vaso-vasostomía” y consiste en la conexión de los conductos deferentes de forma que sea posible que los espermatozoides vuelvan transitar de forma correcta y tengan así opción de fecundar el óvulo de la mujer después del eyaculado.
Tratamientos de reproducción asistida para ser padres después de una vasectomía
La cirugía para revertir la vasectomía no es la única opción que puede plantearse un hombre si quiere volver a ser padre. De hecho, como acabamos de ver, puede incluso que la vaso-vasostomía no obtenga el resultado esperado y no podamos contar con ella como una opción real.
Cuando esto sucede, o por qué no antes, la Medicina Reproductiva también nos ofrece alternativas que posibilitan la paternidad.
Una opción es la extracción de espermatozoides directamente a través de una biopsia, bien sea del propio conducto deferente o de los testículos.
De esta manera podemos obtener una muestra de espermatozoides de la que seleccionaremos los más adecuados para conseguir la fecundación de los ovocitos disponibles para una fecundación in vitro.
Al margen, también es posible contar con una muestra de semen de un donante anónimo para fecundar el óvulo de la pareja y buscar así su embarazo, ya sea a través de un tratamiento de Inseminación Artificial (IA) o de Fecundación in Vitro (FIV).
¿Es posible la preservación de la fertilidad en el caso de los hombres?
La preservación de la fertilidad masculina es una opción totalmente viable y posible.
De hecho, el origen de la preservación parte de la posibilidad de almacenar los espermatozoides del hombre antes del inicio de un proceso oncológico para poder ser padre en el futuro.
Por lo tanto, una opción viable, cuando el hombre toma la decisión de realizarse la vasectomía es la de preservar una muestra de su semen por si, en el futuro, su idea cambiara y deseara ser padre de nuevo.