Por el Comité Editorial de Reproducción Bilbao
Los tratamientos de reproducción asistida con óvulos de donante son un servicio cada vez más demandado en las clínicas de fertilidad. Como os hemos contado en anteriores ocasiones, el retraso en la edad en la que las mujeres buscan el embarazo conlleva que la calidad y cantidad de sus óvulos sea peor, por lo que en ocasiones no es posible conseguir el embarazo con óvulos propios, hecho por el cual este tipo de tratamiento ha aumentado de forma considerable los últimos años, entre otros motivos que veremos más adelante.
¿En qué consiste un tratamiento de ovodonación y en qué casos está indicado?
Los tratamientos de ovodonación permiten a mujeres que no pueden quedarse embarazadas de forma natural tener la posibilidad de ser madres gracias a los óvulos de una donante. La técnica es muy similar a la de una Fecundación in Vitro (FIV) convencional, fecundándose el óvulo en nuestro laboratorio de reproducción asistida con el semen de la pareja, en caso de tenerla, o recurriendo también a un donante.
Este tratamiento está indicado en los siguientes casos:
- Mujeres de edad avanzada: como hemos comentado al principio, uno de los grandes problemas que vemos a diario es el retraso en la edad de la maternidad con el consiguiente empeoramiento de la calidad y descenso de la cantidad de óvulos
- Pacientes con fallo ovárico, por ejemplo, a raíz de la menopausia o algún tipo de cirugía
- Pacientes que presenten fallos en los tratamientos de Fecundación in Vitro o a las que se les haya detectado alguna anomalía en los tests genéticos
Debemos destacar que, los tratamientos en los que utilizamos óvulos de una donante, son los procedimientos de reproducción asistida con mayores tasas de éxito, eliminando, además, la limitación por la edad de la paciente.
¿Cómo seleccionamos a las donantes de óvulos en Reproducción Bilbao?
En primer lugar, es importante que sepáis que, en España, la donación de óvulos está regulada por la Ley 14/2006 de 26 de Mayo sobre técnicas de Reproducción Humana Asistida y por los Reales Decretos 412/1996 y 1301/2006, que establecen que la donación de gametos es voluntaria, formal, anónima y altruista.
En nuestro caso, la donante, mayor de edad, firma por escrito un contrato con Reproducción Bilbao, debiendo garantizarse la confidencialidad tanto de la donante como de la paciente.
En Reproducción Bilbao, se realiza un exhaustivo examen médico genético y psicológico para la selección de donantes de óvulos y se utiliza una sola donante para una paciente potencial. Para la asignación de una donante para una determinada pareja o mujer se realiza, además del matching genético que excluye la transmisión de enfermedades genéticas recesivas, un matching fenotípico mediante un programa de inteligencia artificial que evalúa el fenotipo de la donante y la receptora (Fenomatch®)
Las pruebas a las que debe someterse una posible donante de óvulos son:
Las donantes potenciales son sometidas a una revisión médica que incluye la realización de una historia clínica, exploración física general, ginecológica y mamaria con realización de una completa analítica de sangre. Se realiza, además, un exhaustivo cribado de enfermedades infecciosas.
Se realiza un estudio genético de las donantes potenciales incluyendo un cariotipo y un análisis para descartar las mutaciones genéticas más frecuentes. El perfil de mutaciones genéticas recesivas (cara al mencionado matching genético) es de cumplimiento obligado en nuestro centro.
Se realiza un estudio psicológico en profundidad realizado por nuestros especialistas en psicología.
Una vez asignada una donante adecuada, el tratamiento de la mujer receptora es muy sencillo, consiste en la administración de un tratamiento oral para la preparación del endometrio. Es suficiente con un control ecográfico. En un momento dado, y tras la entrega de semen por parte de la pareja, en caso de tenerla, se procede a la transferencia embrionaria. En el caso de que hubiere embriones de buena calidad no transferidos se procedería su vitrificación.
En Reproducción Bilbao, además, guardamos muestras del ADN de nuestras donantes en un criobanco. Esta posibilidad nos permite, si fuese necesario, realizar cualquier estudio genético en un futuro.